Torrente. Valencia.
Este es uno de esos proyectos que nacen de la propia parcela, de las premisas existentes. El propietario disponía de una parcela resultante de la segregación de una de mayores dimensiones con vivienda ya construida. En ella queda la piscina. Las medianeras son ortogonales entre sí y los lindes con los viarios forman curva, lo que, respetando los retranqueos que marca la normativa, va configurando la edificación. Orientamos la casa al este, al sol naciente dejando delante la piscina. A poniente quedan los espacios sirvientes, cocina y baños, moldeados en un juego de volúmenes por la forma de los lindes de la parcela con los viarios. Aprovechamos la planta de cubierta para ganar altura y, mediante una terraza tipo chill out, disfrutar de las vistas al mar Mediterraneo y la Albufera de Valencia.